Newbery jugaba mal y era menos que Porteño, pero a los 35 del primer tiempo Luis Labatti de cabeza abrió el marcador y todo cambió – Matías Manuale se encargó de poner el2 a0 definitivo a dos del final – Gracias a la victoria, el equipo de Barrio Progreso es líder en soledad del grupo “C” con siete unidades escoltado por Carabelas dos puntos detrás
Previo al partido Porteño y Newbery compartían el primer puesto del grupo “C” con cuatro puntos. Este dato hacía que el partido tome real interés ya que un triunfo de cualquiera les iba a permitir ser el dueño absoluto del grupo.
“Siempre fue duro Newbery, desde las inferiores que nos complica”, sentenció post partido el goleador Ignacio Van Vecelaere reflejando lo incómodo que se les hace jugar en contra del Rojinegro a más de un equipo de la zona. Es cierto que los dirigidos interinamente por Nico Mangione no jugaron bien, pero con entrega y orden táctico, más que nada en el segundo tiempo, sacaron adelante una parada complicada.
A Newbery le costó más de la cuenta poder hacer pie en los primeros 45 minutos ya que los locales dominaban la pelota, el ritmo de juego y más de una vez se acercaron al arco de Julio Ravagnan, aunque sin tanto peligro. Un par de desbordes de Gerardo Rivas e Iván Gómez parecían el camino para el equipo de Omar Ayala, pero con el correr de los minutos ambos se desinflaron.
El conjunto rojense no encontraba la pelota y Marcelo Marengo marcaba el camino con sus proyecciones que complicaron toda la tarde a los defensores rivales. A los 7 minutos el lateral derecho aviso con una especie de centro-tiro al arco que el arquero Héctor Imperador controló sin inconvenientes. Tres minutos después Porteño tuvo una clara jugada de gol a través de Rubén Alonso, pero el disparo del mediocampista se fue lejos del palo.
Pero a los 35 el partido se transformó, porque en el mejor momento del local Marengo pasó al ataque, como en toda la tarde, y la defensa local le cometió falta cerca del vértice del área. Aldo Calogero pitó falta y de ese tiro libre que se hizo cargo Gastón Díaz vino la apertura del marcador. El centro preciso del siete a la cabeza del central Luis Labatti terminó en la red y el visitante logró ponerse arriba en el marcador.
Con el 1 a 0 Newbery se fue al descanso más tranquilo y ya en el complemento dicha tranquilidad de los jugadores se vio reflejada en el juego de los mismos. Porteño intentó buscar el empate desde el arranque pero el Rojinegro respondía. A los siete, nuevamente Marengo pisó el área rival con pelota dominada, fue hasta el fondo y efectuó un remate que se estrelló en el palo izquierdo de Imperador.
El partido era de ida y vuelta, a los 14 Van Vecelaere encaró solo hacia el arco de Ravagnan, pero el nueve se enredó y no pudo terminar bien la jugada. Diez minutos después fue Gaynor quien entró al área adversaria, Imperador le cometió un claro penal al delantero pero el arbitro del partido hizo vista gorda y no sancionó la pena máxima.
Newbery ya era más, mucho más que Porteño que se iba desintegrando minuto a minuto. De todos modos los locales estuvieron a punto de poner el marcador en igualdad, pero el cabezazo de Raúl Farré no tuvo dirección ni fuerza y terminó en las manos de Ravagnan. A cinco del final, otra vez Farré desaprovechó una situación importante.
Recién a dos minutos del final Newbery pudo estirar la diferencia para poder esperar mucho más relajado el pitazo final del juez del juego. Gonzalo Davio quedó cara a cara con el uno local, el delantero picó perfectamente la pelota por encima del arquero. Parecía que entraba pero un defensor rechazó a medias en la línea con una especie de chilena y la bocha le cayó a Manuale que solo tuvo que empujarla de cabeza para liquidar el partido.
El 2 a 0 terminó siendo justo ya que el Rojinegro fue de menor a mayor en el desenlace del partido, mientras que los locales al revés, terminaron peor de lo que empezaron. Con el triunfo Newbery suma dos al hilo, lo cual le permite disimular, y que parezcan lejanos, importantes problemas internos que el club tiene fuera de los límites del campo de juego.